jueves, 27 de octubre de 2016

Cuando se estropeó la tele...

Hoy en día todo el mundo tiene televisión en casa y la mayoría de los mortales no podemos imaginar como sería vivir sin ella. Pues yo he tenido que aprender a vivir prácticamente sin televisión durante los últimos 20 días. Os pongo en antecedente. 

En mi casa hay 4 televisiones: en el salón, en la cocina, en el cuarto de mis padres y en el garage. A principios del mes de octubre, una noche estaba viendo el hormiguero en la tele del salón cuando de pronto la imagen empezó a verse doble. Lo primero que pensé es que era un problema de la cadena, pero cuando empecé a cambiar de canal, la apagué, la encendí y seguía viéndose igual de mal mis sospechas se fueron confirmando. El colofón fue poner el Smart TV y ver que también se veía la imagen doble. He de decir que la tele del salón es una Samsung de 40'' con Smart TV, 3D y todas las tonterías que le puedas añadir a un televisor, que en su día costó unos 900€, ahí es nada...

Al día siguiente llamamos al servicio técnico oficial de Samsung y entramos en contacto con un taller de Granada, cuyo nombre no voy a decir. Hablamos con ellos y quedan en venir a ver la tele. En cuanto el técnico (que él dice que no toca televisiones sino lavadoras, lavavajillas, frigoríficos, etc.) la ve dice "uyyy, esta tele me la tengo que llevar y que la miren en el taller". Pues bien, se la lleva y a los dos días nos llaman con el diagnóstico fatal: "es el display, arreglar la avería cuesta unos 300€". Mátame camión, ¡como puede costar tanto una reparación de una cosa que no sé ni lo que es! Nos ofrece la alternativa de ponerle un display de segunda mano y le decimos que tenemos que pensarlo. 

Al par de días llamamos y nos pasan directamente con el técnico, y nos dice que el precio final es de 235€ con la "pieza" nueva. Por ese precio le decimos que sí la vamos a arreglar y nos dice que para el martes o miércoles siguiente estará arreglada, y ya estamos a 13 de octubre. 

Pasa el martes y miércoles siguiente y seguimos sin noticias de la tele, llamamos el jueves 20 y nos dicen que el lunes la traen. OK. Lunes 24, llama el técnico para decir que al arreglar la tele ha aparecido otra avería ¿? y que arreglarla cuesta más que comprar una nueva. Pero que si queremos nos trae una nueva de características similares por 400 y pico euros. Raro, ¿no? Jarro de agua fría. Y digo yo, ¿has tenido que esperar 20 días para decirme que la tele no tiene arreglo? Que cada uno saque sus propias conclusiones... 

Pero aún hay más. Ese mismo día viene el técnico que no arregla televisiones a devolvernos la tele (previo golpe al pie de la tele al entrar a mi casa), la conecta y ¡oh, sorpresa!, la tele no enciende. Y claro, yo le digo, vale que no tenga arreglo pero si te doy una tele que se ve doble qué menos que me la devuelvas igual que estaba. Digo yo... Pues bien, decide volver a llevarse la tele para que me la devuelvan tal cual estaba al principio. Nos quedamos huérfanos de tele, con un cabreo considerable y tomamos la decisión de que por la tarde vamos a salir a buscar una tele nueva. 

Os ahorro el periplo por tiendas y páginas web y os llevo directamente a la decisión final. Hemos comprado la LG 40UH630V, una tele de marca LG de 40" con 4K y el Smart TV más nuevo, el Web OS 3.0. La vimos en Hipercor y nos gustó la calidad de imagen y comparando precios decidimos comprarla en PCComponentes, ya que nos suponía un ahorro de 130€ con respecto a Hipercor y Corte Inglés, en total ha costado 416€ con gastos de envío.

Pues bien amigos, ayer por la tarde nos llegó la tele (en menos de 48h) y por la noche la conectamos. En principio parece una maravilla, se ve muy bien y tiene funciones que no sé ni para qué sirven. La única pega es que el Web OS 3.0 es tan moderno que no sé usarlo bien, y parece ser que al ser un sistema tan novedoso aún no están disponibles las apps de Atresplayer ni Mitele. Para mí una putada, pero tendremos paciencia y esperaremos a que las actualicen y sean compatibles.

A día de hoy, 27 de octubre, sigo sin saber nada de la antigua tele, pero lo que sí tengo claro es que esa tele me la van a devolver, funcione o no, porque para que ellos la utilicen para revender piezas prefiero cargármela a martillazos. Que a mí no me gusta desconfiar de la gente ni de su competencia o capacidad para desempeñar un trabajo, pero hay que reconocer que el caso es raro, y a mi me queda la duda de sospechar que ellos se han terminado de cargar la tele, porque es muy extraño que ni siquiera encienda.

Así que resumiendo, me he pasado 20 días que me he limitado a ver la tele en la cocina durante el rato que estaba comiendo y los lunes por la noche me bajaba al garage a ver Mar de plástico. El resto de noches en lugar de ver la tele las he invertido en leer o ver algún vídeo en youtube en el portátil. La verdad es que he echado bastante de menos la tele del salón, porque algunas tardes de sábado o domingo las he tenido que pasar viendo la tele en el garage, que aunque es una LG de 43" (sin smart ni chorradas) el sofá no es tan cómodo como el del salón y tampoco tenía la libertad de ver yo una peli en el salón y mis padres cualquier otra cosa en el garage o viceversa.

De todo esto, mi lectura es que la próxima vez que se estropee la televisión o cualquier otro aparato o electrodoméstico lo último que voy a hacer es llamar al técnico e intentar repararlo, porque como se suele decir me cuesta más el collar que el perro, y ya nos lo dijo uno de los chicos que nos atendió en El corte inglés, los aparatos están programados para que se rompan a los X años para que el mercado se mueva. También tengo claro que no voy a comprar el modelo más novedoso ni más caro del mercado, puesto que se va a romper igual.

¿Os ha pasado alguna vez algo parecido? ¿Qué opináis del servicio técnico, es sospechoso o soy una paranoica? Nos vemos pronto.

Besis.

martes, 11 de octubre de 2016

El golfo de Cádiz y la estrecha de Gibraltar - Lara Smirnov

¡Hola! Sé que no tengo excusa ni perdón y que llevo casi un mes sin actualizar pero es que no he tenido tiempo para nada, espero poder ser más constante a partir de ahora. Hoy os hablo de un libro que acabo de terminar y que llevaba tiempo queriendo leer porque me llamó la atención el título, se trata de El golfo de Cádiz y la estrecha de Gibraltar, de Lara Smirnov.

El golfo de Cádiz y la estrecha de Gibraltar

Sinopsis: Cuando la formal Victoria acompaña a su amiga a los castings del nuevo reality "Pecado original", no se imagina que ella será la elegida para viajar a una isla del Caribe donde está a punto de empezar el nuevo programa estrella de la temporada. Allí conoce a Manu, un guapo y simpático gaditano que participa en el concurso tras perder una apuesta.
Vicky se siente muy atraída por él, pero no se fía de las bonitas palabras de los hombres, y especialmente de las de éste, al que ve como un golfo incapaz de tomarse nada en serio. Por su parte, Manu piensa que ella es una estrecha estirada que se cree superior al resto de los concursantes.
Sin embargo, la atracción entre ellos es tan evidente que hasta el volcán de la isla vecina amenaza con entrar en erupción.

Mi opinión: La trama se desarrolla en un concurso de televisión, un reality show llamado Pecado original que recuerda muchísimo a Supervivientes, ya que consiste en que ocho personas tienen que sobrevivir en pareja en una isla e incluso tienen que saltar desde un helicóptero para llegar a la isla. Los presentadores del programa son Juanra Bonet y Luján Argüelles y entre los personajes se distingue claramente un Rafa Mora, aunque con otro nombre. 

Emma y Victoria son amigas desde siempre y viven en Gibraltar. Sus madres, Rocío y Carmen, las tuvieron muy jóvenes cuando se quedaron embarazadas de cada una de un británico, la diferencia es que el padre de Victoria, un diplomático inglés, sí que la ha reconocido como hija y se ha hecho cargo de ella aunque desde la distancia. Todo empieza cuando Victoria acompaña a su amiga y casi hermana Emma al casting, pero cual es su sorpresa que la elegida para participar es ella. Su propósito es ganar el premio e invertir ese dinero en estudiar un máster, pero la cosa se le complica cuando conoce a Manu, el concursante de Cádiz, porque la idea que tenía ella de como comportarse durante el concurso cambia completamente.A partir de ahí surge la historia de amor y ya os podéis imaginar como acaba la historia.

A mí personalmente no me ha gustado este libro. Tampoco tenía muchas expectativas pero me ha parecido demasiado simple. Es entretenido pero nada más, en ningún momento me ha enganchado y probablemente la semana que viene no me acuerde ni de cómo se llaman sus personajes.

Tenía ganas de leerlo porque me llamó la atención el título, me pareció gracioso y decidí darle la oportunidad. Lo que he notado es que la historia no tiene mucho de invención, porque el reality es parecido a uno que ya existe e incluso los personajes recuerdan a algunos "famosillos" de los que vemos cada día en la televisión.

Resumiendo, no le puedo sacar mucha más chicha a este libro. Ni lo recomiendo ni tampoco recomiendo no leerlo, es entretenido y punto. Hasta ahora no había leído nada de esta autora y no es que esté especialmente interesada. Si me vuelvo a encontrar con un título que me llame la atención quizá lo lea pero no voy expresamente a buscar nada de ella.

Y hasta aquí la entrada de hoy, espero no dejar tanto tiempo hasta la próxima vez que actualice, voy a poner todo de mi parte. Nos vemos pronto.

Besis